Por todo el mundo es conocida la importancia del aire comprimido en la industria pero, ¿Conocemos realmente cuanto de importante es esta para nuestros sistemas de filtración?
Dos son las fuentes de energía vitales para que un sistema de filtración funcione, energía eléctrica y aire comprimido. Es por esto por lo que es sumamente importante conocer, controlar, medir y actuar para asegurar un suministro ininterrumpido de las mismas.
Si bien es verdad que todos los fabricantes de filtros requieren en proyecto de un aire limpio, seco y desengrasado, pocos son los que lo comprueban y/o mantienen a lo largo de la vida útil del equipo. Esto supondrá a medio plazo, sin lugar a dudas, el auténtico “Cáncer” de la instalación. Profundicemos un poco más.
Punto de rocío del aire comprimido.
Es la temperatura a la que la humedad del aire comprimido condensa generando acumulaciones de agua en el circuito. Esto genera corrosión en los conductos que a su vez genera contaminación por partículas de óxido que obstruye elementos de mando y sistemas de soplado o limpieza del filtro. Además, este agua acaba humedeciendo la media filtrante lo cual acaba rápidamente con su vida útil.
Esta problemática viene dada bien por la inexistencia de un sistema de secado, un mal funcionamiento del mismo o, la más habitual, una incorrecta selección del secador y auxiliares con puntos de rocío inadecuados para la ubicación del sistema de filtración.
El punto de rocío es el parámetro más controlado mediante la instalación de medidores en continuo de punto de rocío pero, ¿realmente es suficiente? La respuesta es NO.
El aceite en el aire comprimido, aún más perjudicial.
La calidad del aire y el buen funcionamiento de nuestros equipos no solo dependen de la humedad y las partículas contenidas. La experiencia nos ha demostrado que, incluso con puntos de rocío adecuados, podemos llegar a tener problemas graves. Esto es debido al contenido de aceite en el flujo de aire.
Muchos compresores utilizan aceites sintéticos o minerales para su funcionamiento. Este aceite se mezcla con el aire al comprimirse y un elemento separador, dentro del propio compresor, se encarga de separar esta mezcla aire/aceite.
Una falta de mantenimiento del elemento, las altas temperaturas del verano o por ausencia de limpieza del refrigerador, la degradación del aceite y un largo etcétera, puede hacer que este aceite acabe en el circuito del aire comprimido.
Este aceite es letal para los sistemas de limpieza, degrada la fibra de la media filtrante sea cual sea su composición y, al igual que la humedad, la colmata rápidamente.
Un mantenimiento adecuado del compresor junto a una selección adecuada de filtros coalescentes para el aire comprimido se hace indispensable para poder evitar problemas en nuestros sistemas de filtración.
Qué tipo de secador utilizar.
Dos son principalmente las tecnologías para el secado del aire comprimido utilizadas habitualmente en los sistemas de filtración. Por Refrigeración y por adsorción. La primera refrigera el aire comprimido por debajo de su punto de rocío, como máximo hasta +3ºC, condensando toda la humedad hasta esa temperatura. El segundo hace pasar el aire a través de una alúmina que adsorbe la humedad contenida en el aire llegando a puntos de rocío de entre -20 y -70ºC.
Aunque la primera opción es económicamente más viable, no siempre es adecuada dado que, debido a su funcionamiento, el punto de rocío máximo que ofrece es de +3ºC siendo alcanzable en muchas instalaciones a la intemperie e incluso en interiores. Además, requiere de un mayor mantenimiento dando muchos problemas en ambientes sucios o con agentes corrosivos en la atmósfera.
En conclusión.
De nada vale intentar llevar un mantenimiento adecuado de un sistema de filtración centrándonos en el filtro y sin conocer todos y cada uno de los elementos y energías que este utiliza.
El conocimiento en la generación y tratamiento del aire comprimido, como energía fundamental para nuestros equipos, es indispensable para evitar problemas graves en nuestros sistemas de filtración.
Un diagnóstico adecuado y un asesoramiento experto es necesario para eliminar o evitar esta problemática que la experiencia nos ha demostrado recurrente.
Desde Haizetek podemos ayudarle, disponemos de los equipos de medida y humanos necesarios para dar solución definitiva a los problemas relacionados con una mala condición del aire comprimido. Somos especialistas en ingeniería, aplicaciones y mantenimiento de filtros / sistemas de filtración.